¿Conciertos en silencio? La alternativa que podría salvar los shows de Aitana y Lola Índigo en el Bernabéu

Las nuevas normas de ruido ponen en jaque los conciertos en el estadio del Real Madrid. ¿La solución? Auriculares para todos los asistentes.

Los próximos conciertos de Aitana y Lola Índigo en el Estadio Santiago Bernabéu, previstos para junio de 2024 y 2025, respectivamente, han desatado una ola de expectación… y de preocupación. ¿El motivo? Las recientes multas millonarias impuestas a artistas como Taylor Swift, Duki o Karol G por exceder los límites de ruido durante sus actuaciones en el mismo recinto. Las quejas vecinales tras el paso de la estrella estadounidense por Madrid marcaron un precedente que amenaza ahora con poner en peligro futuros eventos.

Con una capacidad para más de 80.000 personas, el Bernabéu es uno de los escenarios más emblemáticos de España. Sin embargo, su ubicación en pleno Paseo de la Castellana lo convierte en una zona especialmente sensible al ruido, y las autoridades han dejado claro que los límites de decibelios no se pueden sobrepasar sin consecuencias.

Aitana y Lola Índigo
Imagen tomada del Instagram de Aitana

La solución: conciertos con auriculares

Para sortear esta situación, una opción innovadora comienza a tomar fuerza: los ‘silent concerts’ o conciertos silenciosos. Este formato permite a los asistentes disfrutar del espectáculo mediante auriculares inalámbricos, reduciendo al mínimo el impacto acústico exterior. Ya ha sido utilizado en festivales internacionales y podría ser la clave para mantener vivo el calendario musical del Bernabéu.

No obstante, el coste de esta tecnología no es menor. Según la empresa SilentSystem Audio Group, el presupuesto para equipar un concierto de este tamaño con auriculares y sistemas de transmisión ronda los 650.000 euros, cifra superior incluso a las multas por exceso de ruido, que en algunos casos han alcanzado los 400.000 euros.

La inversión sería alta, sí, pero permitiría celebrar los conciertos sin riesgo de cancelación ni conflicto con los vecinos. Eso sí, el sistema no puede silenciar el entusiasmo del público para ver Aitana y Lola Índigo un elemento que, por ahora, sigue sin solución tecnológica.

¿Estamos ante el futuro de los conciertos en ciudades?